[su_box title=»Católicos solteros» box_color=»#519691″]Ella es lo último en lo que piensas antes de dormirte y tu primer pensamiento por la mañana… Tu corazón se acelera cuando lo ves en el pasillo… No puedes recordar la vida sin el otro….
Pero, ¿es de verdad? Hazte las siguientes preguntas para arrojar algo de luz sobre el tema.[/su_box]
Católicos solteros
¿Estás enamorado de la persona o de cómo te hace sentir?
Es fácil quedar atrapado en una relación basada en las emociones. Muchos confunden amar a una persona con amar la forma en que esa persona les hace sentir. San Pablo dijo: «[El amor] no busca su propio interés» (1 Cor 13,5). Evalúa cuidadosamente por qué estás en tu relación. Cuando el objetivo es la santidad del otro, la felicidad será un subproducto natural. Lo que nos lleva a la segunda pregunta:
¿Es su alma su primera prioridad?
Dios quiere revelarse a nosotros a través de nuestros encuentros con los demás. Dios inventó las relaciones humanas para hacernos santos. El verdadero amor debería apuntar al Cielo y motivarnos a hacer todo lo posible para proteger el alma del otro. Amar a alguien nunca significa pecar con él. El amor construye, fortalece y santifica al buscar el bien de la persona que amamos. La lujuria es egoísta, pasional y debilitante. Dios es amor, y una relación centrada en Dios es el mejor lugar para buscar el auténtico amor humano.
¿Son compatibles?
¿Duele el amor? Pregúntale a Jesús.
Ya sea por una tragedia o por un parto, el sufrimiento es inevitable en la vida. ¿Es ésta la persona con la que quieres compartir tu cruz? Estás dispuesto a soportar también sus sufrimientos?
Si amas a alguien, no le preguntas si lo amas
Cuando salía con mi marido en la universidad, muchos amigos me preguntaban cómo sabía que estaba enamorada. Es un cliché, pero lo único que podía decir era: «Simplemente lo sé». Si te preguntas si es amor verdadero, probablemente no lo sea. Esto no es algo malo. Simplemente significa que estás creciendo en tu discernimiento de si esta persona es o no para ti.
Recuerda, cuando se trata de relaciones hacer todo bien no siempre significa que es la voluntad de Dios
El Señor conoce el camino más seguro para llegar al Cielo y tiene una vocación personal para ti. Dentro de esa vocación conoce la mejor orden religiosa o persona que te hará más feliz y más santo. ¡No apresures tu corazón! Permanece constantemente abierto a la voluntad de Dios en tus relaciones. Si te importa alguien querrás que encuentre el plan de Dios para su vida con o sin ti en ella. Confía en el Señor y Él no te decepcionará.