[su_box title=»Media naranja» box_color=»#519691″]Literalmente, no puedes apartar los ojos (y las manos) de tu bae, porque estás enfermizamente enamorado de él.[/su_box]
Media naranja
- Los más pequeños gestos físicos te marean en el amor
Cuando tu enamorado o enamorada te aprieta la mano de forma inesperada o te da un fuerte abrazo, tu corazón literalmente da un vuelco y el mundo entero puede parecer un borrón. - Se cuelan en tu mente en los momentos más aleatorios
Estás en un taxi, tomando un café o mirando la pantalla del ordenador en el trabajo. De repente, se te escapa una sonrisa de oreja a oreja y acabas pensando en tu pareja. Tu interior se derrite en un charco de papilla y tu día se ilumina instantáneamente con sólo pensar en él. Has cambiado su nombre más de tres veces en tu teléfono. Al principio, era su nombre propio. Luego fue el apodo que le pusiste a tu amor, que más tarde se cambió por el de bebé, ¡y no sabes dónde parar! - No te estresas pensando en el futuro
La universidad o el trabajo o simplemente la vida, en general, va a cambiar de un millón de maneras tanto diminutas como enormes, pero no te sientes estresado por ello. Cuando estás con alguien que te hace feliz constantemente, el futuro no da miedo, es emocionante. - Su dolor se convierte en tu dolor
Cuando tu media naranja sufre, te golpea tanto que empieza a parecer que todo te pasa a ti. - Los dos tenéis una frase especial
Una frase dulce que sólo tiene sentido para los dos y que es especial, como el «quizás ‘bien’ será nuestro ‘siempre'» de La Falla en Nuestras Estrellas, excepto que es de verdad. A veces te vuelves a enamorar de su genialidad. Como cuando él o ella hace o dice algo que le hace aún más guapo, ¡te mueres! Otras personas dicen que esa sensación de mariposas se desvanece con el tiempo. Tú no eres otras personas.
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